En general, dentro de la Fisioterapia aplicada a niños con cáncer, pretendemos detectar con la mayor premura posible las secuelas derivadas de la enfermedad y del tratamiento, y actuar desde el inicio del proceso para lograr que la recuperación sea lo más óptima posible y favorecer la integración social” .El cáncer infantil y su tratamiento suele debilitar a los niños y adolescentes, y ocasionar numerosas secuelas en su salud. En los casos en los que el niño se encuentra hospitalizado, los fisioterapeutas trabajan para evitarle contracturas y deformidades, así como tratar de recuperar al máximo la capacidad motora.